sábado, 10 de julio de 2010

Silencio


Había hecho silencio durante mucho tiempo.Silencio en silencio durante mucho diferentes envases ,dosis y escenas.Impuesto.Arquetípico.Porque era salud.Comé y callate.Porque era pecado.Porque su papá le dijo que debían callar por los militares, para salvar sus vidas.Y fue juntando palabras en la boca y se las iba tragando una por una y todas juntas.Apendió el arte de hablar sin decir nada y parecer simpática.Pero siguió tragando.El tiempo transcurrió y , a pesar de que la coyuntura fue cambiando, el atragantamiento de frases, palabras sobre todo esas que sirven para decir lo que se siente , siguieron yendo para adentro.Eran miles de millones de abecedarios posibles de categorizarse de cuanta manera se le ocurriese y suficiente para mantenerla entretenida.Eso sí, el día que una palabra pisaba su laringe buscando el aire puro, ella perdía el control seguramente a causa de deber decir algo no tan agradable a los demás. Comenzaban a salir las palabras de una en una y en una retahila infinita y todas juntas mientras ella se ahogaba, su corazón tamborileaba hasta dejarla sin sentido mientras las palabras fuera de sí seguián golpeando a quien estaba dialogando con ella.Una verdadera masacre verbal.Ya no se se diferenciaban sintagmas, morfemas,fonemas...Ni siquiera vocales y consonantes.Una locura el silencio destrozado.

viernes, 18 de junio de 2010

José Saramago


Anoche tuve un sueño raro.No alcanzó a ser una pesadilla.Tal vez fue un sobreaviso , un deja vu de algo que estaba sucediendo.Ahora también es noche y he vuelto a escribir.He vuelto a escribir en este blog.Me moría de ganas de escribir pero no tenía ganas de hacerlo.Cuestión que ese sueño raro quedó encastrado a la noticia de la muerte de José Saramago.Anoche en mis últimos cansados tweets enuncié mis deseos de dar a conocer mis follow friday mientras tomaba mates esta mañana y la mañana me encontró con esta pérdida.Y me puse a buscar huérfanos como yo para compartir el amor y este desprendimiento de ese símbolo, ser humano y escritor que hoy nos dejó.
Jamás voy a olvidar la calurosa tarde de verano en Lanzarote en la que conocería personalmente a Saramago y escucharía una conferencia que resultó ser el Discurso de Aceptación del Nobel ante la Academia Sueca. Corría el año 1999.Se estaba terminando el Siglo.Yo estaba viviendo en otro país.En un lugar llamado Puerto del Carmen. Viví o soñé que vivía allá? Viví soñando? Saramago fue un testigo involuntario de un fragmento de mi vida en una isla conmmovedora. Un fragmento de mi vida. Antes de ir a vivir a Lanzarote mis compañeras de trabajo me dijeron que tenía que leer algo de este hombre que recién había ganado el Nobel.Así que una de esas idas y venidas dentro de la capital pasé por Yenny y compré aleatoriamente Todos los Nombres.Subí al tren de una tarde de lluvia con el libro con olor a nuevo y bocaditos de dulce de leche de Bonafide.Cuando llegué a Lanzarote ya sabía más o menos quién era José Sramago.Al meno sme había hundido en esa escritura con matices entre kafkianos y cierto perfume a Borges que no perdía su identidad.Toco de oido.Solamente soy una lectora sedienta.Cuestión que mi amiga canaria, la misma que me acompañó a la conferencia aquella tarde, también me llevó a la Biblioteca de Tías.Recorrí todos los libros de Saramago y tomé uno al azar.Estaba firmado de puño y letra .Se erizó mi piel.Esa vez me atrapó uná temática que nada tenía que ver con esa isla que se me presentaba llena de mar y de sol.Ensayo sobre la Ceguera. El encuentro era en el Centro Cívico El Fondeadero.Junto al Mar.Cerca del Puerto.Había mucha gente y mis lágrimas comenzaron a caer al mismo tiempo que Saramago en un portuñol intense leía el discurso. Cuánta emoción.Ni hablar del momento en que me animé a acercarme y esperar para pedirle que se tome una fotografía conmigo. Esa fotografía es uno de mis certificados de vida.Después de ese día seguí leyendo y queriendo a ese hombre que hablaba pausado, como susurrando y hablaba de sus raíces para describirse sí mismo. Volví a Argentina un tiempo después y llegó el momento de El Evangelio Según Jesucristo.Leía un párrafo.Dos. A lo sumo dos hojas.A veces más. Nadie es el mismo despupes de leer a ciertos autores.Este era uno de ellos. Después vinieron otros de sus libros entre los cuales se encuentra El Hombre Duplicado .En él ,Saramago incluye una cita del Libro de los Contrarios que inspiró de alguna manera el título de este blog y dice "El Caos es un Orden a Descifrar". Tomo las palabras de la escritora Angeles Mastretta de su Blog Puerto Libre ( Diario El País) : Saramago de nuestro corazón, no nos dejes descansar en paz mientras escucho la canción que teje la lluvia.


lunes, 8 de marzo de 2010

Cuchillos y palabras. Angel Petisme



Hemos buscado la belleza

explorando las aceras;

los rascacielos se caían

sobre nuestras cabezas.

Hemos leído a los poetas,

juntos nos han visto llorar;

hemos quemado las carreteras

rozando la eternidad.



Tendría que soñarte

si no te vuelvo a ver,

tendría que inventarte,

buscarte en otra piel...



No quiero que te vayas,

creí que te quedabas,

espérate a mañana:

Cuchillos y palabras.



Hemos temblado de ternura

en el silencio de los bosques,

y recogido en la basura

las Rosas de la Noche.

Nos hemos muerto tantas veces

por esos cuerpos y esas calles,

y ahora el tiempo nos convence:

no somos inmortales.

Más allá de la verdad Margaret Atwood



Más allá de la verdad,
está la tenacidad: de esos
árboles enanos y musgos,
acoplados a una roca plana
creyendo las mentiras del sol y
rechazando así la gravedad
y de este cactus, recobrando sus fuerzas
frente a la arena, sí, sólo es corteza
dura y espinas pero sobrevive
lo mejor que puede.

Rosa Montero dixit




©William Klein



Quizá
uno
empieza
a envejecer
en el momento
en
que
empieza
a dolerle
la memoria.

Rosa Montero
Foto

Mujer en Buenos Aires En Buenos Aires




Las mujeres se saben de memoria

La palabra tequiero,

Saben cómo viajar hasta un hotel

O hasta un adiós

Deambulando por todas las caricias,

Saben cómo hacer para que un hombre

No las eche de menos

Y también cómo inventarle lágrimas al día.



Las mujeres de Buenos Aires

Se saben de memoria los besos,

Las cosas del amor.

A veces, sin embargo, se las oye llorar,

En el café La Paz, el Ramos, la Giralda,,

Sin ir más lejos ayer la vi a Cristina,

Estaba tirada contra un vidrio

Contando la garúa



Y afuera no llovía.

Adrián Desiderato

Un lunes cualquiera





I
Tenìa una peinado que , si bien en lo relativo a sus intenciones
pretendiò tener el estiloEvita(EvaDuarte) , quedò plasmado en ciertas ondulaciones
que se extendìan hasta la coronilla.

El color ,desorientado entre rojo y castaño.
Parecìa que unas manecitas con un pincel lo hubiesen pintado con
tèmperas al agua.

Pero, la nuca traicionaba la estètica.Allì no habìa color,
solo cabellos blancos.
Y lo que de frente eran ondas muy elaboradas, de perfil,
mostraban la pinza que se habìa chantado.
Como si hubiese salido a la calle sin poder, tal vez, por falta
de tiempo,elaborar su pretension estètica.Me detuvo en mi camino
apurado hacia la radio.Yo a pie.Ella en bicicleta.Era a raìz de una
carta astral que sorteamos

el ùltimo dìa del año en el programa.Por supuesto, la harè yo.
La del peinado me decìa que una señora querìa comunicarse conmigo
por lo de la carta.Respondì que ya habìa sorteado , calculando
los segundos que me quedaban para llegar a la radio, sacar los cd,
buscar las gafas para leer, enchufarme el mp3 y, en caso de que
hubiese conexiòn a Internet, husmear las noticias.La señora aminorò
la velocidad de la bicicleta , intentado convecerme de que ese podìa
ser un buen trabajo, aunque ella no creìa en nada de eso.
Mientras seguìa empeñada de transitar esas pocas calles que
me quedan desde mi casa a la radio, la Sra. del pelo pintado
con tèmperas , seguìa emitiendo su discurso.No creo en nada
de eso y ademàs, en mi època no se usaba eso de saber a que hora
nace uno.Claro , respondì, respirando profundamente, ya que no
querìa perder el oxìgeno que me restaba en esos metros de la meta
final, donde seguramente ni un mate me esperarìa.Ella continuaba...
de mis hijos recuerdo la hora , màs o menos en que naciò cada uno...
Què bien...Si me acuerdo cuando naciò Fulanito...fue a las ocho
de la noche, y cuando naciò fulanita... a la madrugada.Cuando naciò
Mengana me acuerdo que pasò un aviòn.Me detuve.Lo que decìa era
demasiado importante para seguir caminando.La mirè.Era
imprescindible mirar el rostro , de esa mujer que seguìa hablando.
De Mengana, me ayudò una de l,as que hacen la limpieza.
No me creìan que yo los tenìa ràpido.Pero recuerdo clarito que
justo pasò un aviòn.


2

Para vos , dijo la reproducciòn viviente de un simio cuasi hombre,
con un poco de voluntad del paleolìtico , tal vez rèplica viviente de Pedro Picapiedras andropàusico,y señalò el telèfono.
Llamaba la señora que habìa profetizado la del cabello pintado

con tèmpera y que recordaba que pasò el aviòn justo que nacìa su hija.
La señora desplegò su amplio conocimiento de lo esotèrico dejando pasmado mi canal auditivo derecho.Al menos la luz
de EN EL AIRE no se encendìa.
Tratè de exolicarle que yo leìa tarots y aprendìa a hacer cartas natales
pero que en este momento ...si cuando vivia en España...comprendo ,
dijo la voz que salìa del auricular.A mi me hizo una carta natal Tu Sam...
Tu sam ! dije en alta voz de manera tal que la locutora salio de su
momento cuasiautista y me mirò sorprendida.Sì ,Tu Sam me hizo una
Carta Natal , hace mucho tiempo que muriò pensaba yo.
Pero no se que la hice , era larga, la perdì.La locutora habìa comenzado
a reìr en un do sostenido e imparable, sin soluciòn de
continuidad...argumentè que jamàs podrìa comparame
con el señor Tu Sam en varios idiomas hasta que la voz en
el telèfono cediò a su espoleo con fines de arrancarme un sì.

Tu Sam fascinaba gallinas.
A mi me fascinan los aviones

Todavìa es lunes ( continuarà)

©Patricia Ce

viernes, 26 de febrero de 2010

MARÍA ZAMBRANO MÉTODO

María Zambrano


Hay que dormirse arriba en la luz.
Hay que estar despierto abajo en la oscuridad intraterrestre, intracorporal de los diversos cuerpos que el hombre terrestre habita: el de la tierra, el del universo, el suyo propio.
Allá en los profundos, en los ínferos el corazón vela, se desvela, se reenciende en sí mismo.
Arriba, en la luz, el corazón se abandona, se entrega. Se recoge. Se aduerme al fin ya sin pena. En la luz que acoge donde no se padece violencia alguna, pues que se ha llegado allí, a esa luz, sin forzar ninguna puerta y aun sin abrirla, sin haber atravesado dinteles de luz y de sombra, sin esfuerzo y sin protección.

MARÍA ZAMBRANO

(Del libro ‘Esencia y hermosura’. Antología.

ITALO CALVINO, ‘Las ciudades invisibles’.

“El infierno de los vivos no es algo por venir: hay uno, el que ya existe aquí, el infierno que habitamos todos los días, que formamos estando juntos. Hay dos maneras de no sufrirlo. La primera es fácil para muchos: aceptar el infierno y volverse parte de él hasta el punto de dejar de verlo. La segunda es riesgosa y exige atención y aprendizaje continuos: buscar y saber quién y qué, en medio del infierno, no es infierno, y hacer que dure, y dejarle espacio.”

ITALO CALVINO, ‘Las ciudades invisibles’.

viernes, 19 de febrero de 2010

Nocturno, de Patricia Ce ૐ

Agito las alas
camino despacio
la noche ya no es mía


sé que mañana
floreceré
en un pétalo
estallo sin lunas
en sones cansinos
divago perdida
y mis manos puras
conjuran
despiadados olvidos

Antes puse a remojar
un sueño
en agua y jabón

Los ojos de la niebla
las grises espadas del viento
me confunden el beso
y aunque huelo a milagro
me desgarra el misterio


Once exactos pasos
me alejan de tus cielos
reclamo un rayo de sol
recibo una manojo de hielo
y se trransforma en gota
en débil gota sin recuerdo

Me desperezo atenta
aúlla un compás y prometo
no mirar el reloj
ni escuchar su lamento.
Hay praderas de luz
túneles vacíos de abrazos
respira un semáforo lejano
se detiene
el mundo
un momento

Un espejo amodorrado, somnoliento
no puede verme
entonces me invento

Una piedra dura interrumpe el pulso
de un suspiro
un cigarrillo se deshace
en el centro de una mirada
caricias contu,aces
hieren el cordón de la vereda
muerdo la paz
y solo resta atravesar el resto de esta noche
que ya no es mía.


Veneno de Luna

1999 ©Patricia Ce
San Telmo, Buenos Aires, Argentina

miércoles, 17 de febrero de 2010

Veneno de Luna - Tangos - II

Busco huellas
señales
rastros
indicios
y sin embargo
sé que estás ahí.

Noche traslúcida
Exudo mariposas de colores.
Mi voz se acalla en tu silencio
Se fusionan puertos , puertos y aeropuertos
y sin embargo
no me duelen ausencias
Es tu voz la que busco
y de repente
ya no es tuya
y ya no soy yo

Será a mi a quién buscan
Será mi deseo el que late en tu sangre?


Desenceguezco


Inopinadas
desnudias
caricias falaces
se encienden vastos terrirorios
se eleva mi templo
y
sin embargo
el tiempo e tu silencio
es el tiempo de mis verbos procaces
de infértiles, inevitables escalofríos
vértigo
juego seductor que despliega la muerte
y sin embargo


Cannon de medianoche
puñado de palabras corroídas
ramillete robado
adolescencia arrancada de hace poco

Hipotetizo
conjuro la ilusión
rasgo mis blancas vestiduras
y me sospecho
héroe sin mito y pies descalzos

y sin embargo
escruto mi silencio
e inten to avizorar
en que calleja podría gritar
lo que me pudre el corazón
hasta convertirlo en un nuevo block cuadriculado

Entonces
enmudezco
me revelo
me niego
a embriagarme de ausencias y espejos
a sobrevivivir cercenando mis espantos
y sin embargo
todavía quiero
truco
magia
quiero
eso intento creer
al menos eso creo
al menos eso quiero

Quiero más de lo que menos quiero
y sin embargo
juego a creer
que menos quiero.


1999© Patricia Ce

martes, 16 de febrero de 2010

Veneno de Luna - Tangos



I

Una esquina
amanece
despierta

Atardece
la aurora
en la luz de un farol

Un viejo piano
acuna
nostalgia
pasos
la memoria


Sin tamaño,
adormecida
la esperanza
acaricia
transmuta
gemidos


Un bandoneón
arrulla
túnel onírico
entretiempo
cadencia
transición
susurro


Vaho de nostalgia
azul de tiempo



La luna
amor prohibido
memoria de besos y palabras

Moran
demoran
sobre estantes
todas las edades
todos los espejos

Café
Cafetín
Numen sublime
renaces
Hueles a milagro.


©Patricia Ce

Tríptico

I
De los hechos

Tejo , destejo preguntas.
Voy , vengo sobre un mar desteñido.
Llevo una flor en el pelo.


II

Plegaria


Prohibido bañarse en una lágrima de agua salada
Ell sol agiliza el libre albedrío de las endorfinas
Y mañana al despertar
intentaré
una plegaria en tu nombre y en el mío
sagrado secreto a voces
incolume aventura desgarrada
en un amanecer sin sospechas.
Que la próxima copa de vino sea nuestra
y no nos quemen los labios as palabras
Que el sexo no esté en liquidación
ni pueda pagarse en doce cuotas sin intereses
Que las mitocondrias olviden el placer de estar vivo
y el gusto, será nuestro
Que la luna nos estruje lugares prohibidos
Que la primavera nos corrompa en cada intersticio
en cada frontera cotidiana.
Que nos devore el sol
a mi primero..
para escribir mil páginas
o tal vez , una menos
Tú , anunciarás en cadena que nos hallamos allí
a orillas del mundo
en la periferia de este suburbio cosmopolita
con la única misión de rescatar algún fuego sagrado
- esto queda bien a los ojos sordos de quienes creen en la ceguera-
Los que sustentan el pensamiento único
los que se psicoanalizan en brazos del demonio
los ciberfantasmas de la aldea global
se morderán los labios
de bronca,m de envidia.
Y tú y yo
sin argumento
libres de caer en la tentación y que nunca nos dejes,
sostendremos el timón del interno 272 de la línea 60.
En una ceremonia erótica
pondré en tus manos
el número y el apellido de un contestador automático
con frías señales para calientes mensajes o viceversa.
Entonces
comenzaré a agitar mis alas
para echar a volar sin paracaídas.
Pero antes,
entonaré mi credo

III

Credo


Señoras & Señores
creo en el poder de esta plegaria
en el fin del principio del siglo
en relojes muertos
en misiles impotentes
en un abecedario henchido de fonemas
que persiguen grafemas y morfemas
recuperados de la dura carga de haber recibido rótulo sobre rótulo
en el tañir de una campana en un atardecer
en los benditos crímenes sin víctimas
en los viajes al lejano país del dolor
del que no se vuelve sino otro
en un estandarte plagado de pétalos nuevos y fragantes
y en el arcano mayor que lee el amor en las líneas de mi mano
y en mis manos
que leen las notas que la vida sopla sobre mi oido.


©Patricia Ce