Soy consciente de que me reitero en este poema y en èste poeta que descubrí hace muchos años.El ejercicio de la docencia me exigiò siempre abrir puertas , ventanas y buscar nuevos horizontes para resignificar dinàmicamente fechas que si bien se recuerdan una vez al año ( cada vez más por los fines de semana "puente") forman parte de un proceso del cual conozco fragmentos y opiniones con tendencia.No me da verguenza reconocer que deberìa alfabetizarme en lo que se refiere a historia.Profundizar en los procesos , causas y consecuencias.A pesar de ello no faltò en mi práctica docente ni en mi vida el amor a la patria y capacidad para transmitirlo.Y no es necesario ser San Martìn ni crear la Bandera Nacional en los tiempos que corren.Eso ya fue hecho.El héroe de estos tiempos es bastante escaso.Pero no es necesario inmolarse.Como dice Leopoldo de Luis en este poema, la patria la hacemos todos,cadad dìa, en pequeños gestos que tal vez el neoliberalismo archivò o que se consideran demodée.
Dadas las circunstancias y lo que está en nuestras manos hacer , Leopoldo de Luis nos abre un panorama donde la Patria es hecha por la suma de esfuerzos de todos.Ojalà descrubramos nuestro protagonismo. como ciudadanos , con derechos incluso a pensar distinto, con derecho a pensar, a elegir la paz ante la violencia que atraviesa todas las instituciones de la aldea global , de la màs pequeña a la màs chica.Somos responsables de nuestras elecciones, de elegir el viento o la veleta como dice Tejada Gòmez...No podemos "quedarnos inmòviles al borde del camino", ni congelar el jùbilo, ni querer con desgano parafreseando al querido Mario Benedetti.La verdadera revoluciòn es la interior...la propia.El verdadero cambio.Dignificarse para dignificar a mi pròjimo.
No hay cambio si no se restauran lazos, se reinauguran vìnculos y no estoy escribiendo al estilo Coty Nosiglia la naif "Boluda Total".
Hoy me despertè y descubrì que aùn sigue viva en mi la frase de Martin Luther King: "Aun si supiera que mañana el mundo se habría de desintegrar,
yo igual plantaría mi manzano."
Es imposible dejar de ser uno mismo.Jamàs intentarè suicidarme las alas.
Y dice Leopoldo de Luis:
Cada uno en el rumor de sus talleres
a diario la patria se fabrica.
El carpintero la hace de madera
labrada y de virutas amarillas.
El albañil de yeso humilde y blanco
como la luz.
El impresor de tinta
que en el sendero del papel se ordena
en menudas hormigas.
De pan y de sudor oscuro el grave
campesino.
De fría
plata humeante y relente
el pescador.
El leñador de astillas
con forestal aroma cercenada.
De hondas vetas sombrías
el minero.
De indómitas verdades y hermosura, el artista.
Cada uno hace la patria
con lo que tiene a mano:
la sumisa herramienta,
los vivos materiales de su quehacer,
un vaho de fatiga,
una ilusión de amor,
y en fin,
la rosa de la esperanza,
aun en la sonrisa.Leopoldo de Luis
Construir la historia, volver sobre la historia...
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